Sebasg1973
New member
Nos podemos mudar a Berlin?
Contra la crisis, burdeles de Berlín ofrecen una tarifa plana sexual
Por 70 euros se puede disfrutar de los servicios de todas las prostitutas que desee el cliente durante una noche. También están incluidas las bebidas. La prostitución es legal en Alemania y el sector cuenta con unas 400.000 meretrices registradas.
La crisis económica mundial afecta a todos los sectores, inclusive al de la prostitución. Pero este, lamentablemente pensarán algunos, no recibe la ayuda estatal como hacen los bancos, automotrices, metalúrgicas y demás. La solución a sus problemas tiene que ser más original. Y por ese camino van los burdeles de Berlín.
Varios de ellos, y de otras localidades alemanas, lanzaron una oferta: paga usted 70 euros -unos 100 dólares- y tiene derecho a todo el sexo que quiera durante una noche con todas las prostitutas que quiera. La oferta incluye también las bebidas. La prostitución es legal en Alemania y el sector cuenta con unas 400.000 meretrices registradas ante las autoridades.
Pero a esas mismas autoridades no les ha hecho mucha gracia la tarifa plana y han empezado las redadas e incluso los cierres de algunos locales. Según Reuters, 700 policías participaron el pasado fin de semana en varias redadas en diversas ciudades alemanas y precintaron dos burdeles en Baden-Wuttemberg. Dos de Berlín y otro de Renania del Norte-Westfalia sufrieron también la revisión policial pero consiguieron continuar con sus actividades.
Las autoridades alemanas piensan que la prostitución tradicional no está tan mal, pero sí este nuevo tipo de barra libre porque, según Ulrich Goll, ministro de Justicia de Baden-Wuttemberg, "la mujer se convierte en un objeto, se le priva de su derecho de elegir con quién se va a la cama y eso supone un atentado contra su dignidad".
Legalmente la Policía se acoge a irregularidades como la falta de higiene, el fraude fiscal o el empleo de prostitutas sin contrato o incluso sin permiso de residencia y trabajo en Alemania para inspeccionar los locales. Las organizaciones que defienden a las prostitutas dicen que en parte es cierto, pero que muchas denuncias no tienen fundamento y no son más que una estratagema de las autoridades regionales para acabar con la Ley de Prostitución, aprobada en 2002.
Otra de las iniciativas novedosas, ésta de un lupanar de Berlín, ofrece descuentos a los clientes que llegan en bicicleta "para luchar contra el calentamiento global". Dicen que así además acaban con el problema de aparcamiento en las cercanías de su establecimiento. También se descuenta a quienes demuestren que llegaron hasta el burdel en un medio de transporte público, con lo que la "Maison d'Envie", como se llama el centro, dice estar sponsorizando a la compañía municipal de transportes.
Pero nadie ha sido tan original como el "Pussy Club", de Berlín. Éste ofrece "entrada gratis a las esposas de los clientes".
Contra la crisis, burdeles de Berlín ofrecen una tarifa plana sexual
Por 70 euros se puede disfrutar de los servicios de todas las prostitutas que desee el cliente durante una noche. También están incluidas las bebidas. La prostitución es legal en Alemania y el sector cuenta con unas 400.000 meretrices registradas.
La crisis económica mundial afecta a todos los sectores, inclusive al de la prostitución. Pero este, lamentablemente pensarán algunos, no recibe la ayuda estatal como hacen los bancos, automotrices, metalúrgicas y demás. La solución a sus problemas tiene que ser más original. Y por ese camino van los burdeles de Berlín.
Varios de ellos, y de otras localidades alemanas, lanzaron una oferta: paga usted 70 euros -unos 100 dólares- y tiene derecho a todo el sexo que quiera durante una noche con todas las prostitutas que quiera. La oferta incluye también las bebidas. La prostitución es legal en Alemania y el sector cuenta con unas 400.000 meretrices registradas ante las autoridades.
Pero a esas mismas autoridades no les ha hecho mucha gracia la tarifa plana y han empezado las redadas e incluso los cierres de algunos locales. Según Reuters, 700 policías participaron el pasado fin de semana en varias redadas en diversas ciudades alemanas y precintaron dos burdeles en Baden-Wuttemberg. Dos de Berlín y otro de Renania del Norte-Westfalia sufrieron también la revisión policial pero consiguieron continuar con sus actividades.
Las autoridades alemanas piensan que la prostitución tradicional no está tan mal, pero sí este nuevo tipo de barra libre porque, según Ulrich Goll, ministro de Justicia de Baden-Wuttemberg, "la mujer se convierte en un objeto, se le priva de su derecho de elegir con quién se va a la cama y eso supone un atentado contra su dignidad".
Legalmente la Policía se acoge a irregularidades como la falta de higiene, el fraude fiscal o el empleo de prostitutas sin contrato o incluso sin permiso de residencia y trabajo en Alemania para inspeccionar los locales. Las organizaciones que defienden a las prostitutas dicen que en parte es cierto, pero que muchas denuncias no tienen fundamento y no son más que una estratagema de las autoridades regionales para acabar con la Ley de Prostitución, aprobada en 2002.
Otra de las iniciativas novedosas, ésta de un lupanar de Berlín, ofrece descuentos a los clientes que llegan en bicicleta "para luchar contra el calentamiento global". Dicen que así además acaban con el problema de aparcamiento en las cercanías de su establecimiento. También se descuenta a quienes demuestren que llegaron hasta el burdel en un medio de transporte público, con lo que la "Maison d'Envie", como se llama el centro, dice estar sponsorizando a la compañía municipal de transportes.
Pero nadie ha sido tan original como el "Pussy Club", de Berlín. Éste ofrece "entrada gratis a las esposas de los clientes".
